Inspirado en la cocina india, este plato combina trozos tiernos de muslo de pollo marinados en yogur y especias como garam masala, cúrcuma, jengibre, coriandro y comino. El pollo se cocina a fuego controlado en una salsa cremosa de pomodoro, cebolla caramelizada y toques sutiles de ajo y especias tostadas.
El resultado es un curry equilibrado, con un sabor profundo, especiado pero amable al paladar, donde cada ingrediente potencia al siguiente sin opacarlo.
Ideal para acompañar con arroz basmati, naan o couscous. Una experiencia culinaria que mezcla tradición y comodidad, lista para disfrutar sin complicaciones.
Perfecto para dos y acompañarlo con arroz blanco (preferiblemente alguno aromatizado como jazmin o basmati)
